1. Cuando una evaluación de riesgos revele que los controles son inadecuados o que comienzan a volverse inadecuados, se los deben descartar o preparar un programa con el fin de reducir los riesgos al mínimo y, en todo caso, de cumplir con los criterios vigentes en la materia. Si no dispusiera de tales criterios, el IR debería formularlos de manera que resulten compatibles con las medidas de control de riesgos. Al preparar los programas se deberían tener presentes los principios generales que rigen la adopción de las medidas de control para diseño e instalaciones, sistemas de trabajo y protección personal; asimismo, se debería procurar que sean adecuados la información, la formación y la capacitación que los trabajadores deban recibir, así como los sistemas de verificación y vigilancia y las disposiciones previstas para hacer frente a situaciones de emergencia.
2. Todo IR, previa consulta con sus colaboradores, debería formular y aplicar un programa destinado a eliminar o reducir al mínimo los riesgos identificados en la utilización de solventes. Dicho programa debería garantizar que los riesgos sean eliminados o reducidos al mínimo en el más breve plazo y haciendo uso de los medios más apropiados de que se disponga. Dado que la conclusión inmediata de este género de medidas será quizá difícil de lograr, el suministro de equipos de protección personal podría permitir una reducción de riesgos más rápida aunque transitoria. En el programa se deberán precisar las acciones necesarias para eliminar o reducir al mínimo los riesgos, así como el tiempo necesario para su puesta en práctica.
Diseño y emplazamiento de instalaciones y equipos
Principios generales
El diseño y el emplazamiento de las instalaciones y de los equipos deberían contemplar el objetivo de moderar o reducir al mínimo los riesgos inherentes al almacenaje de solventes en el trabajo, ya sea reduciendo la emisión de solventes nocivos o inflamables, incluidos los vapores o evitando la propagación de incendios o explosiones en los lugares de trabajo.
El total aislamiento de los procesos que implican la utilización de solventes es el medio óptimo para disminuir los riesgos que les son inherentes. Cuando haya lugar, se debería descartar el almacenamiento de productos contenidos en pequeños recipientes, optando en su lugar por el almacenamiento a granel, en recipientes que son provistos, a tal efecto, por el Servicio de Higiene y Seguridad.
El diseño y el emplazamiento de las zonas de trabajo, las instalaciones y los equipos deberían ser concebidos de manera tal que se elimine toda exposición innecesaria de los trabajadores a los solventes peligrosos; debería contemplarse la instalación de sistemas de ventilación con extracción localizada, que reduzcan al mínimo la necesidad de limpieza, y que, al mismo tiempo, faciliten las tareas de mantenimiento y limpieza.
Para reducir aun más los riesgos que se deriven de los solventes peligrosos, las instalaciones, los equipos y los almacenes se deberían mantener apartados respecto de: otros procesos; solventes incompatibles u otros solventes que puedan resultar peligrosos en caso de incendio; locales y otros sitios ubicados fuera de los límites de control del IR y, en el caso de los productos inflamables, respecto de fuentes de ignición fijas.
Sistemas locales de ventilación por extracción
Cuando el aislamiento total de un proceso que implique la utilización de solventes peligrosos no sea razonablemente factible, se debería suministrar y asegurar el mantenimiento de equipos de ventilación por extracción, con el fin de garantizar la rigurosa observancia de los criterios fijados por la autoridad competente, tales como los límites de exposición, y de eliminar o reducir al mínimo el nivel de ciertos riesgos, como los que entraña la alta concentración de productos inflamables.
La ventilación local por extracción debería diseñarse, fabricarse e instalarse de manera tal que garantice ya sea la evacuación segura y efectiva del aire contaminado desde el lugar de trabajo hacia zonas de expulsión adecuadas o una filtración y depuramiento que lo vuelva inocuo, de conformidad con los límites de exposición u otros criterios de control del medio ambiente de trabajo establecidos, aprobados o reconocidos por la autoridad competente. Dicha ventilación debería diseñarse también con miras a evitar la propagación de incendios y explosiones, de conformidad con los principios delineados en el párrafo
Al instalar la ventilación local por extracción se debería proceder de inmediato a verificar su correcto funcionamiento y el cumplimiento de los requisitos de diseño. Para asegurar su funcionamiento eficaz, con el fin de proteger a los trabajadores respecto de las exposiciones, se debería emplazar el sistema de ventilación por extracción en el sitio más próximo posible de los puntos de emisión de solventes peligrosos. Se debería procurar la reducción de la longitud y de la cantidad de recodos de las tuberías, con el fin de optimizar su funcionamiento.
Eliminación o control de las fuentes de ignición
La preocupación primordial al diseñar y al montar instalaciones y equipos en que se utilicen solventes inflamables debería ser la eliminación de atmósferas inflamables. No obstante, se debería realizar una evaluación de las probabilidades de que tales atmósferas se generen durante cualesquiera de las fases de utilización de los solventes, para proceder luego a eliminar o reducir al mínimo las eventuales fuentes de ignición.
Las zonas de trabajo deberían clasificarse según el grado de probabilidad de que una concentración inflamable se produzca en ellas. En tales zonas, y en la medida de lo posible, no se deberían utilizar sino aparatos eléctricos de probada seguridad. Cuando ello no resulte factible, se deberían diseñar y construir aparatos eléctricos cuyas características correspondan al grado de peligrosidad determinado. Su diseño y construcción deberían estar en conformidad con las normas reconocidas o aprobadas por la autoridad competente.
Algunos ejemplos de formas de eliminar fuentes de ignición son:
a) El establecimiento y respeto de zonas en que «está prohibido fumar».Demás esta decir que en todo el ámbito de la FCEN esta prohibido fumar
b) La prohibición del uso de bombas y de otros aparatos eléctricos al interior de los muros de contención de la zona de emplazamiento de los depósitos de almacenamiento (no obstante, en casos de escape de productos, se deberían ubicar las bombas en la propia zona de contención de los productos)
c) La prohibición de utilizar motores eléctricos al interior de conductos que contengan solventes inflamables, reemplazándolos, por ejemplo, por ventiladores de paletas accionados a distancia
d) La prohibición de las operaciones de recarga de los acumuladores para carretillas elevadoras en las zonas o locales de almacenamiento de productos.
Se podría reducir la generación posible de cargas estáticas que ocurre, por ejemplo, en los solventes apolares, tales como los solventes de hidrocarburos: evitando verter los solventes en caída libre al llenar recipientes a partir de tuberías de conducción o al trasvasarlos y reduciendo la velocidad de bombeo durante las operaciones de descarga o utilizando aditivos eléctricos antiestáticos.
Se debería prestar especial atención a la dotación de medidas técnicas para evitar incendios o explosiones debidos a la acumulación y descarga de electricidad estática. Dichas medidas se deberían controlar periódicamente.
Se debería adaptar la calefacción de los talleres y almacenes a las condiciones que pueda haber en cada recinto. Cuando se almacenen o utilicen solventes inflamables se deberían tomar en cuenta los siguientes aspectos:
1) Evitar la utilización de calefactores portátiles, como por ejemplo calentadores de gasóleo o de gas, radiadores eléctricos incandescentes y radiadores eléctricos rellenos de aceite
2) Se deberían adoptar sistemas de calefacción que utilicen gasóleo o gas del tipo indirecto, es decir, aquellos en que los residuos de la combustión son evacuados en condiciones de seguridad hacia la atmósfera externa. Las tomas de aire de tales sistemas deberían instalarse en sitios seguros, donde resulten improbables derrames o escapes de solventes inflamables que pudieran penetrar en el sistema de calefacción.
Sistemas y métodos de trabajo
Se redactarán procedimientos de trabajo con miras a aplicarlos rigurosamente en todas las actividades que impliquen la utilización de solventes peligrosos, con el fin de proteger a los trabajadores contra los riesgos que la evaluación realizada por el IR haya podido determinar. El IR es el responsable de que todo el personal bajo su dirección conozca, acepte y cumpla con la normativa al respecto.
La elaboración de un procedimiento de trabajo deberá ser consecutiva a la adopción de otras medidas destinadas a eliminar y reducir al mínimo los riesgos (por ejemplo, determinación de los solventes, la tecnología y los mecanismos técnicos de control más adecuados para una determinada actividad laboral).
Todo procedimiento de trabajo deberá integrar las medidas de control de la manera que garantice su óptima eficacia.
Todo procedimiento de trabajo deberá definir claramente las responsabilidades individuales en la ejecución de un trabajo, especificar las diversas tareas que lo conforman (delimitando responsabilidades en caso de superposición de funciones) y facilitar el intercambio de la información entre todos los miembros del grupo de trabajo.
Los procedimientos de trabajo deberán elaborarse de conformidad con la legislación y la práctica nacionales.
Salvo cuando se trate de tareas simples, los procedimientos de trabajo deberán consignarse por escrito.
En particular, los procedimientos de trabajo deberán consignarse por escrito y aplicarse cuando la buena calidad de los procedimientos y de los métodos de trabajo sea decisiva, como, por ejemplo, el mantenimiento periódico, las pruebas de funcionamiento, la revisión y la reparación de fallas y averías en las instalaciones y equipos, el trasvase de solventes (incluyendo la carga y descarga) y la identificación del contenido de los nuevos recipientes recibidos, de los riesgos potenciales imnanentes y de las medidas de precaución correspondientes.
Se debería prestar especial atención a la elaboración de procedimientos de trabajo y medidas en caso de emergencia destinados a personas que trabajen solas, adoptando disposiciones especiales según proceda.
Se deberían establecer procedimientos de trabajo para detener los procesos químicos en caso de emergencia.
Revisión de los sistemas y métodos de trabajo
La revisión de las medidas de control de productos solventes debería comprender las verificaciones frecuentes de los procedimientos de trabajo y deberían tomarse disposiciones adecuadas. Dichas verificaciones deberían realizarse simultáneamente con las verificaciones de la información y la formación
La revisión debería consistir, en particular, en verificaciones de:
los cambios en la plantilla de personal, los materiales, los equipos, los locales y los procedimientos utilizados
los procedimientos en vigor para las labores realizadas fuera o en los horarios de trabajo «normales»
la idoneidad de los sistemas de supervisión
el cumplimiento de los sistemas y métodos de trabajo en los términos previstos, las medidas que se deban adoptar para abandonar un trabajo cuya conclusión resulte irrealizable.
Modificado a partir de documentación de la OIT (Organización Mundial del Trabajo).